Cada 24 de abril se celebra el Día del Pancho, un clásico de la comida callejera que lleva más de un siglo y medio como uno de los platos más populares a nivel mundial. También conocido como “hot dog” o “perro caliente” en otros países, este alimento es de los más sencillos de preparar: salchicha y pan. Más libre elección de toppings o condimentos para hacerlo especial.

Junto con las hamburguesas y las pizzas, los panchos son los reyes de la comida rápida, elementos que en muchas ocasiones ayudan a salir del apuro. Pero también existen “panchos versión gourmet”, con salchichas a la parrilla, al horno o ahumadas, así como también versiones veganas, rebozadas o con especias particulares.

El pancho abre camino a la imaginación. Nadie puede limitar qué sabores experimentar con estas preparaciones, ya que es una de las comidas más personalizables que existen y sus versiones son tan infinitas como se puedan probar.

Con su origen en Estados Unidos, aunque la salchicha fue creada en Alemania, miles de personas lo han conocido por las series o películas, pero con el paso del tiempo lograron ingresar en todo tipo de culturas y adoptaron nuevos estilos según cada país.

El origen del pancho o “hot dog”

El pancho, tal como se lo conoce en la actualidad, surgió en Estados Unidos a mitades del siglo XIX, en la década de 1860. Los primeros en venderlo fueron los locales del carnicero alemán Charles Feltman en unos carritos en las playas de Coney Island -cerca de Nueva York- en 1867. Este inmigrante trasladó la preparación y le dio su estilo de comida callejera de fácil acceso para la clase media.

El negocio prosperó y su imperio se expandió por distintas partes a punto tal que aún continúa vigente en las calles estadounidenses. En la actualidad, cada 4 de julio -Día de la Independencia de Estados Unidos- en Nathan’s se llevan a cabo competencias para ver quién puede ingerir más panchos en un tiempo determinado.