La interna en el gobierno de Javier Milei estalló una vez más, esta vez con la vicepresidenta Victoria Villarruel en el ojo de la tormenta. Tras ser acusada por el propio Presidente de “traición” por su rol durante la polémica sesión del Senado que aprobó los proyectos previsionales y de emergencia en discapacidad, Villarruel no se quedó callada: “Un jubilado no puede esperar, y un discapacitado menos”, lanzó desde su cuenta de Instagram.
Las críticas también llegaron desde la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien la tildó de “cómplice del kirchnerismo” por habilitar el debate en el Senado. Villarruel respondió con munición pesada: “La democracia fue denigrada cuando personas que integraron organizaciones terroristas, como en su caso, manejaron durante décadas el destino del país”, le disparó a Bullrich, sin vueltas.
Los mensajes se publicaron como respuestas a comentarios en un posteo suyo por el Día de la Independencia, donde varios seguidores libertarios la increparon por haber presidido la sesión del jueves. “Que ahorre en viajes y en la SIDE y listo”, retrucó Villarruel, en una clara alusión al gasto del Ejecutivo.
En Casa Rosada calificaron la sesión como un revés político y fiscal, pero el impacto más fuerte fue hacia adentro: quedó expuesta, una vez más, la fractura entre Milei y su vice. Villarruel profundizó el conflicto con varias frases que apuntaron directo al Presidente:
“Si hay equilibrio, asistir a los más desprotegidos no debería ser tan terrible”.
“¿Un presidente que no puede ni saludar a la persona con la que llegó al poder? Haceles el reclamo a él, yo la educación no la pierdo nunca”.
“No uso aviones del Estado, esos solo los usa Milei y su hermana”.
Algunos usuarios libertarios la acusaron de traición, pero Villarruel devolvió la crítica: “El que no debe traicionar lo que dijo es el Presidente. Si lo hace, los demás debemos marcárselo”.
