Un intenso pulso de aire frío se aproxima y se extenderá hasta las provincias del centro de Argentina. Los pronósticos anticipan un marcado descenso de las temperaturas acompañado de lluvias aisladas, lo que podría consolidar una nueva ola polar antes de que termine el mes.
Los modelos meteorológicos señalan la llegada de un frente frío potente para el fin de semana, con un brusco cambio del clima desde la mitad de esta semana. Según el portal especializado Meteored, se esperan dos ingresos de aire frío: el primero, menos intenso, se extenderá hasta este martes y generará aumento de nubosidad sin precipitaciones significativas.
El segundo ingreso, más fuerte y con características propias del invierno extremo, se prevé entre el viernes 25 y el sábado 26. Este frente provocará un descenso notorio en las temperaturas, vientos provenientes del sur y lluvias, principalmente en la zona central del país.
Los modelos del Centro Europeo y del Instituto Nacional de Meteorología de Brasil coinciden en que esta nueva irrupción polar podría alcanzar gran magnitud, afectando desde el norte de la Patagonia hasta el norte argentino, y extendiéndose también a países vecinos como Uruguay, Paraguay, Bolivia y el sur de Brasil.
Desde Meteored alertan que “el evento más significativo se registraría a partir del 23 de julio”, con temperaturas bajas sostenidas durante varios días consecutivos. De confirmarse, esta sería la segunda ola polar del mes para Argentina.
