Trolls en acción: el Gobierno impulsa su reforma laboral con historias calcadas y sin pruebas

Con relatos sospechosamente idénticos sobre supuestos juicios laborales, cuentas alineadas con el oficialismo salieron en masa a militar la reforma laboral en redes sociales. La maniobra fue rápidamente detectada por usuarios que señalaron la coordinación de los mensajes, la falta de evidencias y el intento de manipular la opinión pública.

En las últimas semanas, todo el aparato de comunicación del gobierno de Javier Milei —desde trolls hasta influencers oficialistas— se enfocó en una misma consigna: instalar la necesidad urgente de una reforma laboral. En ese marco, aparecieron en redes sociales decenas de historias casi clonadas: pequeños empleadores que, tras contratar trabajadores “en blanco”, terminan arruinados por un juicio millonario.

Los ejemplos más viralizados fueron publicados por cuentas como la del periodista oficialista Esteban Trebucq (@peladodelatv), @indignadoxd y Fran Casaretto (@Fran_Casaretto_), entre otros. Todos los relatos comparten una estructura similar: alguien abre un local, contrata personal, y al poco tiempo enfrenta una denuncia por maltrato laboral que lo lleva a la quiebra.

Las cifras reclamadas varían entre 1,5 y 2 millones de pesos, lo mismo que los rubros (cafeterías, kioscos, tiendas de ropa), pero el guión es el mismo. La similitud entre las publicaciones llamó la atención de numerosos usuarios, que rápidamente comenzaron a denunciar la operación. El propio Casaretto tuvo que reconocer que el caso no era suyo: “me lo contaron”, admitió, mientras otros simplemente copiaban el posteo.

Peeero…que parecida la anécdota! 🙄

Los difusores de “buenas noticias en #MileiLandia” @peladodelatv y @Fran_Casaretto_ tuvieron una experiencia muy bonita e igual de positiva ❤️

No seas mal pensado kuka mandril! Jamás podrían ser parte de un libreto que les bajan de… pic.twitter.com/aaQgnb3B4q

— Carlos Riello (@riellodecba) July 23, 2025

Manipulación de manual

Esta técnica no es nueva. Es una estrategia clásica de manipulación digital: repetir historias con pequeñas variaciones para instalar una idea fuerza. En este caso, el mensaje es claro: los juicios laborales “ahogan a las pymes” y la única salida es “modernizar” las leyes.

Volvieron los collages militantes. Como en 2011. pic.twitter.com/0URelOeKKG

— Tuits Borrados (@TuitsBorrados) July 23, 2025

Pero detrás de esa supuesta defensa del pequeño empresario, se esconde un objetivo más profundo: debilitar los derechos laborales conquistados en décadas de lucha. Lo que se presenta como “una reforma justa”, en realidad es una avanzada contra la indemnización, la estabilidad laboral y la negociación colectiva.

La campaña busca generar empatía emocional y sentido común favorable a la flexibilización. Pero no es el contenido ideológico lo que más inquietó a los usuarios, sino la falta total de pruebas y la evidente coordinación de los posteos. El debate, entonces, no gira solo en torno a la reforma, sino a los métodos del Gobierno para construir consenso por vía del engaño.

La reacción sindical

Desde las centrales obreras no pasaron por alto la operación. Los gremios vienen alertando que la verdadera intención del oficialismo —ya sea por decreto, ley o vía judicial— es facilitar despidos, eliminar indemnizaciones y reducir al mínimo el poder de negociación de los trabajadores.

La embestida digital por la reforma laboral se suma a otras iniciativas del Gobierno, como el intento de implementar “zonas liberadas” sin protección contra despidos, o el reemplazo de la indemnización tradicional por fondos de cese.

Detrás de cada historia de “pymes fundidas” hay una construcción política. Y detrás de cada tuit viral sin pruebas, una intención clara: legitimar una reforma regresiva que pone en jaque los derechos básicos del mundo del trabajo.

La batalla ya no es solo legal o sindical. También se libra en el terreno digital, donde los relatos falsos son armas de una guerra cultural que busca desarmar al movimiento obrero.