El Gobierno de Javier Milei dio otro paso en su cruzada privatizadora: este lunes formalizó el inicio del proceso para privatizar por completo a Energía Argentina (Enarsa), la empresa estatal clave en generación y transporte de energía.
El primer paso será la venta de las acciones que Enarsa posee en Citelec, la sociedad controlante de Transener, la principal transportista eléctrica del país. Según la resolución 1050 publicada en el Boletín Oficial, el plazo máximo para concretar la operación es de ocho meses.
Citelec controla el 52,65% del capital accionario de Transener. De ese total, el 51% son acciones clase A y el 1,65% clase B.
¿Cómo será el proceso?
La Agencia de Transformación del Estado coordinará todo el proceso y contratará un banco público para tasar las acciones.
La Subsecretaría de Energía Eléctrica deberá elaborar la documentación técnica y contractual.
La venta se canalizará a través de la plataforma CONTRAT.AR y será por licitación nacional e internacional.
Este movimiento se enmarca en el decreto 286, con el que el Gobierno ya había anunciado su intención de privatizar empresas públicas por etapas. El objetivo oficial es “garantizar la continuidad de los servicios”, aunque los críticos advierten que se trata de una liquidación a precio de remate de activos estratégicos.
¿Qué es Enarsa?
Fue creada por la Ley 25.943 y tiene un rol clave en el sector: desde la exploración de hidrocarburos hasta su comercialización. Su desguace responde al plan de desregulación total que impulsa el oficialismo.