Mientras ajusta a los jubilados, Javier Milei destinó más plata al pago de intereses de deuda que a quienes aportaron toda su vida. Así lo revela un informe del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), que detalla que en los primeros 600 días de gestión, el Gobierno destinó $34,8 billones al pago de intereses, contra $25,5 billones dirigidos a jubilaciones y pensiones.
En total, el gasto en vencimientos de deuda fue de $64,5 billones, una cifra que representa el 8% del Producto Bruto Interno (PBI). El dato no solo muestra el peso del endeudamiento externo, sino también una decisión política: priorizar a los acreedores financieros por sobre los adultos mayores.
El legado de Macri y la soga del FMI
Desde el oficialismo aseguran que el objetivo es evitar un nuevo default. El ministro de Economía, Luis Caputo, quien ya tuvo un rol clave en el Gobierno de Mauricio Macri, defiende el plan: pagar intereses y refinanciar el capital heredado. Sin embargo, fue justamente Macri quien pactó con el FMI el mayor préstamo de su historia: USD 50.000 millones bajo la modalidad stand-by, firmado el 7 de junio de 2018.
Ese acuerdo, negociado a espaldas del Congreso y sin impacto real en el desarrollo del país, sigue condicionando la economía argentina. Ahora, con Milei en el poder, los jubilados pagan los platos rotos.
