La hermana del Presidente encontró la manera de “zafar” de su citación en Diputados por el escándalo de la criptomoneda $LIBRA: el 23 de septiembre no estará en el Congreso, sino acompañando a Javier Milei en su gira a Nueva York, donde el mandatario hablará en la ONU. El canciller Gerardo Werthein también forma parte de la comitiva.
El llamado por $LIBRA
La Comisión Investigadora quería que Karina declare sobre su presunta intervención en la promoción de la cuestionada moneda digital, sospechada de ser una estafa. Le habían dado tres opciones: el 23, el 30 de septiembre o cualquier día antes de las elecciones del 26 de octubre. Pero con el viaje cerrado, “la Jefa” evita su primer cara a cara con el Congreso.
Catalán y la primera prueba de fuego
Mientras tanto, Lisandro Catalán, flamante ministro del Interior elegido por Karina y apadrinado por Guillermo Francos, tendrá su bautismo legislativo. Este miércoles deberá defender en Diputados:
El veto presidencial a la Emergencia Pediátrica y al presupuesto universitario.
La estrategia oficialista para bloquear la ley que busca regular los DNU.
Y evitar que prospere otra citación a Karina Milei, esta vez por la causa de coimas en Discapacidad.
En la Casa Rosada admiten que la pulseada por los DNU es la más delicada: necesitan blindar los decretos de Milei por los próximos dos años. Confían en que la oposición rechace la ley y en que los gobernadores aliados aporten músculo político.
La calle también juega
Mientras adentro del Congreso se libran esas batallas, afuera habrá una movilización masiva: sectores universitarios, de salud y la CGT anunciaron una protesta en defensa del financiamiento público.
El jueves el escenario se trasladará al Senado, donde la oposición intentará dar otro golpe al oficialismo anulando el veto de Milei a la ley de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), que le quita al Gobierno el control discrecional sobre fondos a las provincias.
Catalán tendrá que demostrar en apenas horas si está a la altura de sostener la estrategia de vetos de Milei en un Congreso cada vez más hostil y con la calle presionando.