La Casa Rosada anunció la suspensión de retenciones a la carne bovina, aviar y a todos los granos hasta el 31 de octubre, apenas cinco días después de las elecciones legislativas. La medida busca captar dólares en medio de la crisis cambiaria y llega en un contexto económico complicado.
El decreto fue publicado este lunes en el Boletín Oficial y establece “retenciones cero” para las principales producciones agropecuarias, según confirmó el vocero presidencial Manuel Adorni. La decisión coincide con la necesidad del Gobierno de acumular divisas y, de paso, enviar un mensaje al sector agroexportador.
Impacto inmediato en el campo
El secretario de Ganadería, Sergio Iraeta, se reunió con dirigentes rurales para evaluar las implicancias de la medida, que busca incentivar la liquidación de exportaciones. El gesto ya había sido anticipado por el Presidente durante la 137° Exposición Rural de Palermo, donde prometió alivios en los derechos de exportación.
Reacciones del sector
El titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, reconoció haberse enterado “por la radio”, y aunque celebró el beneficio, advirtió que será necesario analizar “de dónde saldrán los recursos fiscales”.
En tanto, Gustavo Idígoras, presidente de CIARA (Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales), respaldó la medida con cautela: “Apoyamos toda iniciativa que elimine retenciones, aunque sea temporal. Falta ver los detalles de implementación y cuándo se hará efectiva”.
Una jugada con sello electoral
La suspensión de retenciones se mantendrá hasta el 31 de octubre, justo después de las elecciones, lo que refuerza la interpretación de que la medida tiene un claro objetivo político: acelerar la entrada de dólares y asegurar un guiño al poderoso sector agroexportador.
