La Unión Cívica Radical de La Rioja, propone reducir la cantidad de funcionarios para destinar esos recursos a mejorar los salarios de los empleados públicos. Sin embargo, la realidad muestra lo contrario: la planta de funcionarios se duplicó desde que Inés Brizuela y Doria asumieron la intendencia de Capital.
En 2019, el año de la asunción, la nómina de funcionarios era de 260 personas. Para el 10 de diciembre de 2023, ese número había crecido a 532, según los registros oficiales.
La propuesta volvió a ponerse en agenda tras las declaraciones del concejal radical Nazareno Rippa, quien hoy encabeza la lista de Diputados Provinciales de SOMOS UCR. Rippa aseguró: “Si eliminamos los sueldos de los 5.000 funcionarios que tiene el Gobierno Provincial, nos alcanzaría para darle un aumento salarial a todos los empleados públicos”.
El contraste entre la promesa y la práctica genera un debate político fuerte: mientras la UCR propone eficiencia y recorte de gastos para mejorar salarios, la gestión local bajo Brizuela y Doria muestra una expansión de la burocracia que va en sentido contrario.
