Un nuevo episodio de violencia en el Servicio Penitenciario Provincial encendió las alarmas este domingo, cuando un preso resultó herido con un elemento punzocortante. Ante esta situación, Analía Tello, directora del penal, informó que está solicitando el traslado de dos internos a un establecimiento de máxima seguridad, “porque el perfil criminológico así lo amerita”.
Al referirse al hecho, Tello sostuvo: “Acá no hay nada para ocultar. Todo se expone para tranquilidad no solo de las familias de quienes están alojados, sino también de aquellas que han sido afectadas por este hecho y del resto de la población penal”.
Actualmente, en la institución se encuentran más de 550 internos. La directora remarcó que, más allá de los incidentes, el sistema penitenciario debe garantizar tanto la seguridad como la rehabilitación de las personas privadas de libertad. “La misión institucional que nos ha concedido la ley implica trabajar en un lugar de convivencia donde, inevitablemente, surgen problemas. La violencia se intensifica en un contexto de encierro”, explicó.
Sobre el episodio ocurrido, Tello detalló que se trató de un conflicto de convivencia en el pabellón 10 Sur, habitado por 12 internos con distintas causas judiciales. “El incidente se focalizó en ese pabellón, donde conviven personas que pertenecen a diferentes juzgados”, agregó.
