Mientras el Gobierno de Javier Milei busca avanzar con su nueva reforma laboral, el Papa León XIV envió su primera carta dirigida a la Argentina, instando a garantizar un “salario justo” y a que la economía y las empresas promuevan la “inclusión” y la “justicia”.
En un mensaje leído durante la 31° Conferencia de la Unión Industrial Argentina (UIA), el Sumo Pontífice subrayó la importancia de la “dignidad del trabajador”, señalando que esta sigue “siendo vulnerada” en todo el mundo.
“Este espacio nos ofrece, en el marco del Jubileo de la Esperanza, una entrañable ocasión para reconocer que la economía y la empresa, cuando se orientan al bien común, pueden y deben ser motores de futuro, de inclusión y de justicia”, sostuvo León XIV.
El Papa recordó además la encíclica Rerum Novarum de 1891, considerada el acto fundacional de la Doctrina Social de la Iglesia, que denunciaba las “condiciones injustas de muchos trabajadores”. Subrayó el derecho a un salario digno y a “vivir con dignidad”, enfatizando que estas enseñanzas siguen siendo relevantes en un mundo globalizado donde la explotación laboral persiste.
Dirigiéndose a empresarios y dirigentes industriales, León XIV lanzó: “La economía no es un fin en sí mismo, sino un aspecto esencial, aunque parcial, del tejido social en el que se desarrolla el proyecto de amor que Dios tiene para cada ser humano. El bien común exige que la producción y el beneficio no se persigan de manera aislada, sino que se orienten a la promoción de cada hombre y cada mujer”.
Al cerrar su misiva, el Papa deseó que el congreso de la UIA se convierta en “un espacio para renovar el compromiso con una industria innovadora, competitiva y, sobre todo, humana, capaz de sostener el desarrollo de nuestros pueblos sin dejar a nadie atrás”.