La industria en La Rioja atraviesa un momento crítico. La caída de ventas y el cierre de varias empresas locales en los últimos días reflejan un panorama cada vez más complejo, según advirtió la secretaria de Trabajo provincial, Myriam Espinoza.
Impacto directo en los trabajadores
En diálogo con Medios El Independiente, Espinoza señaló que “el Estado nacional está ausente para los trabajadores, pero sí presente para abrir importaciones y beneficiar a los empresarios con aranceles”, una situación que, según explicó, perjudica directamente a la economía local y a quienes dependen de la industria para su sustento.
Empresas que no resistieron la recesión
Entre los cierres recientes se destacan:
Vulcalar (Sanagasta), que dejó sin empleo a 50 personas, afectando la economía del departamento.
Luxo, que tuvo que pagar indemnizaciones bajas debido a su corta antigüedad.
La Riojana, cuya bodega no ha podido cumplir con los pagos salariales en tiempo y forma, y recién el 21 de noviembre abonará los sueldos de octubre.
Espinoza subrayó el impacto social de estos cierres y advirtió que la situación se agravó tras las elecciones: “Cuando vieron que ganó un modelo que no protege la industria, asumieron que no iba a mejorar y se generó este panorama”.
Una industria en jaque
La recesión, la caída del consumo y las medidas de ajuste implementadas por el Gobierno nacional dejan a la industria riojana en un escenario crítico, con cierres, despidos y suspensiones que ponen en riesgo la economía local y el sustento de muchas familias.
