El mercado arrancó el día con buen clima, pero la alegría duró poco. Sobre el cierre, todas las variables financieras se tiñeron de rojo: el dólar oficial terminó a $1450 en el Banco Nación, el riesgo país saltó a 620 puntos y las acciones argentinas que cotizan en Wall Street sufrieron caídas superiores al 7%.
El tipo de cambio oficial subió $20 y finalizó a $1400 para la compra y $1450 para la venta. En el mercado mayorista, el dólar cerró en $1425, todavía lejos del techo de la banda cambiaria establecida en $1505,98 por el Banco Central. “El mayorista subió $22 en la última semana, cortando una racha de cuatro caídas semanales consecutivas”, explicó el operador cambiario Gustavo Quintana (PR).
Los dólares financieros acompañaron la presión alcista, aunque con movimientos moderados: el MEP cotizó a $1453 y el CCL se ubicó en $1492,35.
En Nueva York, la jornada fue un golpe duro para los activos argentinos. Las bajas estuvieron lideradas por Mercado Libre (-7,7%), seguida por BBVA (-3,9%), Supervielle (-3,8%) e YPF (-3%).
Para Gustavo Neffa, director de Research for Traders, el disparador del mal humor global estuvo en la publicación del Departamento de Trabajo de EE.UU., que anunció que los datos laborales de octubre y noviembre recién se conocerán el 16 de diciembre. “La Reserva Federal está tomando decisiones en medio de un apagón de información. El detonante cambió el sentimiento del mercado y volvió a encender el temor a que la burbuja esté explotando”, analizó.
En la misma línea, Diego Martínez Burzaco, country manager de Inviu para Argentina, sumó que el nerviosismo también responde a las dudas sobre el boom de inversiones en inteligencia artificial. “Hace semanas surgieron voces que hablan de una posible burbuja. Los balances siguen siendo sólidos, pero crece el interrogante sobre lo que viene. Además, pesa la incertidumbre por un posible recorte de tasas de la FED”, sostuvo.
El riesgo país volvió a subir, pero mantiene la baja mensual
Aunque durante la mañana había perforado los 600 puntos básicos, el riesgo país rebotó y cerró en 620. Aun así, el indicador —clave para medir la confianza inversora— acumula una mejora del 5,6% en lo que va del mes.
De acuerdo con analistas del mercado, Argentina todavía necesita una compresión mayor del spread para aspirar a volver a emitir deuda en los mercados internacionales. El Gobierno apunta a lograr alguna colocación de bonos durante 2026, una estrategia que también respalda el FMI, que promueve refinanciar los vencimientos con colocaciones en el mercado. Por ahora, el Tesoro deja que provincias y empresas tomen la delantera en materia de emisiones, mientras busca seguir reduciendo su costo financiero.
