La Cámara de Diputados se prepara para debatir la próxima semana un proyecto que restringe el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte del Poder Ejecutivo.
La iniciativa, que ya cuenta con media sanción del Senado, busca acotar una herramienta clave que Javier Milei utilizó desde el inicio de su gestión para sortear la falta de mayorías en el Congreso.
El debate está previsto para el miércoles 8 de octubre, aunque podría postergarse si surgen objeciones de último momento. La propuesta modifica la ley vigente desde 2006, impulsada por Cristina Fernández de Kirchner, y establece que los DNU solo podrán mantenerse vigentes si ambas cámaras los ratifican por mayoría absoluta dentro de los 90 días desde su publicación. Si no se tratan en ese plazo o si una sola cámara los rechaza, el decreto quedará automáticamente derogado. Además, el Ejecutivo no podrá emitir un nuevo DNU sobre el mismo tema durante el mismo año parlamentario.
Tensiones en el oficialismo y divisiones en la oposición
El proyecto obtuvo dictamen de mayoría con 35 firmas, con el respaldo de bloques opositores como Unión por la Patria, Encuentro Federal y buena parte de Democracia para Siempre. Sin embargo, sectores como la UCR no firmaron el dictamen y diputados de Innovación Federal, alineados con gobernadores del norte, también expresaron reservas.
Desde La Libertad Avanza, el diputado Nicolás Mayoraz firmó un dictamen de minoría y criticó la iniciativa: “Todos los gobiernos usaron DNU. Que ahora lo quieran limitar justo cuando no tienen el poder, es un golpe de efecto político”, afirmó. Por su parte, el PRO no firmó ningún dictamen y planteó que cualquier cambio debería aplicarse recién en el próximo mandato presidencial, en 2027.
Qué pasaría si Milei veta la ley
Si el presidente decidiera vetar la reforma, el Congreso necesitaría una mayoría especial de dos tercios en ambas cámaras para insistir con su sanción, lo que deja el escenario abierto y la tensión política en aumento.