Un escándalo de proporciones sacude al gobierno de Javier Milei. Los audios filtrados de Diego Spagnuolo, exfuncionario y abogado cercano al Presidente, revelan un presunto sistema de coimas millonarias que involucra directamente a Karina Milei y a los hermanos Martín y Lule Menem.
Los audios que destaparon la olla
En las grabaciones, Spagnuolo describe cómo los laboratorios eran presionados para pagar sobornos que, bajo la gestión libertaria, habrían pasado del 5% al 8%. Según su relato, el reparto era claro:
3% para Karina Milei
1% para los Menem
4% sin destino conocido
La cifra estimada: un millón de dólares por mes solo en su área.
Karina y los Menem, en la mira
Spagnuolo señala a Karina como la verdadera jefa del esquema y a los Menem como ejecutores. El mecanismo, asegura, se habría replicado en organismos clave como PAMI, Anses y Banco Nación, extendiendo un patrón de corrupción a lo largo del Estado.
Incluso reveló que llegó a advertir al propio Milei:
“Yo hablé con el Presidente. Le dije: no te podés hacer el boludo conmigo”.
El mandatario, según Spagnuolo, eligió el silencio.
Milei echa al denunciante, no a los acusados
La reacción oficial fue inmediata pero polémica: Milei desplazó a Spagnuolo de su cargo, sin dar explicaciones ni ordenar una investigación interna. La decisión, lejos de despejar dudas, reforzó la credibilidad de los audios difundidos por el periodista Mauro Federico y publicados en LPO, medio que ya había revelado maniobras similares en 2023.
Ajuste y corrupción: una bomba de tiempo
El escándalo estalla en medio del desgaste del plan de ajuste: la economía se enfría, la inflación reaparece y los recortes afectan a los sectores más vulnerables. Mientras tanto, el oficialismo queda acusado de engordar con coimas el costo de los medicamentos.
“A Milei le pasa lo que no podía pasarle: ser asociado con la misma corrupción que prometió barrer”, advierten analistas políticos.
Interna feroz en la Rosada
El caso también refleja la guerra interna entre Karina Milei y Santiago Caputo, un choque de poder que atraviesa al corazón del oficialismo. El control absoluto de Karina y los Menem, sin contrapesos, expone al Gobierno a un temblor que puede escalar.
En este escenario, el discurso anti-“casta” de Milei se desploma: el sacrificio social pierde sentido si el Estado termina siendo caja de un sistema de corrupción familiar.