El sector de la construcción atraviesa una de las peores crisis de los últimos años en La Rioja. En apenas dos años, el empleo formal se desplomó de 2.000 a solo 821 trabajadores, según los últimos datos del IERIC (julio 2024).
El presidente de la Cámara de la Construcción, Héctor Spallanzani, advirtió que la situación es “crítica” y que las empresas no logran reacomodarse. “Estamos estancados. Pasamos de tener 2.000 empleados hace dos años a poco más de 800 hoy”, dijo en declaraciones a Riojavirtual Radio.
El empresario atribuyó la caída al paralelismo casi total de la obra pública, medida impulsada por el presidente Javier Milei a fines de 2023, y al escaso movimiento del sector privado, donde solo se mantienen en pie “algunos edificios y construcciones menores”.
Spallanzani también señaló que las demoras en los pagos de las certificaciones agravan la situación: “Hay mucha demora en los cobros, los pagos llegan fraccionados y eso nos impide planificar las obras”.
La Cámara busca reunirse con autoridades provinciales para analizar posibles medidas de reactivación. “Queremos aportar ideas para salir de esta situación”, indicó.
Respecto a la construcción de viviendas, mencionó que aún quedan programas sin terminar y que el principal obstáculo es la falta de recursos provinciales, incluidos los del FONAVI.
La minería, la esperanza del sector
Ante el parate de la obra pública, la Cámara de la Construcción apuesta a la minería como una alternativa para recuperar la actividad.
“Tenemos que crear nuevas actividades. La minería, tanto metalífera como no metálica, es una posibilidad que debemos explorar”, sostuvo Spallanzani.
El dirigente reveló además que junto con otras entidades, como el Centro Comercial e Industrial, la Cámara Empresaria y la Cámara de Servicios Mineros, buscan participar del proyecto Vicuña, en la vecina provincia de San Juan. “Queremos ofrecer nuestros servicios y ver si podemos tener alguna participación, aunque sea mínima, en ese desarrollo”, concluyó.
