Pese al amplio respaldo que cosechó en la Cámara de Diputados, el proyecto que propone una mejora real para los jubilados está trabado en el Senado. El oficialismo, con apenas seis bancas, apuesta a dilatar el debate en comisiones mientras el presidente Javier Milei amenaza con vetar la iniciativa si llega a convertirse en ley.
Un freno a las mejoras para los jubilados
El proyecto aprobado en Diputados contempla una suba del 7,2% para todas las jubilaciones y pensiones, un bono de $110.000 para quienes cobran los haberes más bajos, y la continuidad de la moratoria previsional. La iniciativa fue impulsada por Unión por la Patria, acompañada por otros bloques opositores e incluso por algunos legisladores del radicalismo y de fuerzas provinciales que suelen colaborar con La Libertad Avanza.
El tratamiento en la Cámara baja evidenció un rechazo transversal al ajuste sobre los jubilados. Pero ahora el Senado aparece como un muro: el oficialismo no tiene los votos y apuesta a ganar tiempo.
“La motosierra sigue pasando por los jubilados”
Desde la oposición, la senadora Carolina Moisés (UxP) denunció que “el ajuste a los jubilados no tiene freno y se sostiene en el tiempo”, señalando que el Gobierno sigue recortando a los sectores más vulnerables mientras predica el equilibrio fiscal. “Nuestros jubilados no deben ser moneda de cambio para sostener un déficit cero que los hunde más en la pobreza”, sentenció.


