El día después de las elecciones en la Confederación General del Trabajo (CGT), en Casa Rosada destacaron la elección del nuevo triunviro y no descartaron un posible encuentro con la cúpula sindical.
Tras abrir negociaciones con los gremios, con la promesa de saldar parte de los reintegros de las obras sociales, desde el Gobierno consideraron que Jorge Sola (Seguro), Cristian Jerónimo (Vidrio) y Octavio Arguello (Camioneros) representan “una renovación positiva” y “gente capaz”.
“No son un actor irrelevante. Son uno de los dos principales elementos claves en el proceso de trabajo”, afirmó un vocero con acceso al despacho presidencial.
Aunque todavía no hay convocatoria oficial, desde la Casa Rosada remarcaron que los nuevos dirigentes representan “una renovación largamente reclamada”. Sin embargo, fuentes cercanas al presidente Javier Milei apuntan que se trata más de continuidad que de un cambio profundo en la línea sindical, aunque subrayan que no forman parte del kirchnerismo duro.
El vínculo entre el sindicalismo y la Casa Rosada ha sido fluctuante: desde acercamientos con el entonces jefe de Gabinete Guillermo Francos, hasta tensiones por la reforma laboral.
Por otra parte, Gerardo Martínez (UOCRA) fue ratificado como secretario de Relaciones Internacionales y participa del Consejo de Mayo, que se reúne mensualmente en el Salón de los Escudos del Palacio de Gobierno. Allí se debaten las reformas de segunda generación impulsadas por el Ejecutivo libertario, aunque las decisiones finales sobre los proyectos dependen exclusivamente de las autoridades del Gobierno.