Una de las obras más esperadas por los riojanos está cada vez más cerca de concretarse. Con la finalización de las pruebas de carga sobre el viaducto elevado del nuevo distribuidor vial de la Ruta Nacional 75, se avanza hacia su habilitación definitiva en la zona del monumento al Chacho Peñaloza, en la capital provincial.
Las pruebas realizadas son clave para garantizar la seguridad estructural de este paso vial, pensado para mejorar significativamente la circulación en un sector de alto tránsito y complejidad urbana. El nuevo viaducto forma parte de una intervención integral que busca descomprimir el flujo vehicular en una de las zonas más transitadas de la ciudad, conectando de manera más fluida la avenida Ortiz de Ocampo con los distintos ramales de la RN 75.
Mientras tanto, continúan los trabajos de terminación: se colocan barandas metálicas, se instala un sistema integral de iluminación y se avanza con la construcción de veredas y cunetas. Además, se ajusta el esquema de desvíos y se habilita de forma parcial la nueva rotonda a nivel de suelo, lo que permitirá ordenar mejor los flujos en los distintos sentidos de circulación.
Con esta etapa superada, la obra entra en su tramo final, y su puesta en funcionamiento promete aliviar notablemente el tránsito, brindando mayor seguridad y agilidad para conductores y peatones.