En medio de la crisis energética, el Gobierno Nacional desreguló por completo el mercado del gas en garrafa, eliminando los precios de referencia. La promesa: más oferta y competencia. Pero la realidad golpea duro: una garrafa de 10 kilos ya se vende entre $11.000 y $18.000, ¡muy por encima de la inflación!
Cerca del 40% de los argentinos no tiene acceso a la red de gas natural, y en los sectores más vulnerables, más de la mitad dependen exclusivamente de la garrafa para cocinar y calefaccionarse.
Con la ola polar y la alta demanda, los precios subieron aún más rápido. El Programa Hogar, que subsidia parte del costo, cubre hoy solo el 23% del precio total, cuando en 2023 llegaba al 80%. ¿Qué pasará este invierno con miles de familias en riesgo?
Mientras tanto, las empresas siguen sin extender las redes a zonas periféricas, dejando a muchas familias atrapadas en un mercado sin control y con precios que no paran de subir.