Los gobernadores provinciales están decididos a no ceder terreno y ya tienen todo listo para aprobar en Diputados dos proyectos que afectan directamente las arcas nacionales: la regulación del Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y la redistribución del impuesto a los combustibles líquidos.
Ambas iniciativas ya superaron el filtro del Senado y cuentan con las firmas necesarias para dictaminar en la Cámara baja, donde el oficialismo de Javier Milei enfrenta una posición debilitada. Los mandatarios actúan en bloque, sin intenciones de negociar, priorizando la defensa de sus recursos.
Diputados: mayoría opositora en comisiones y fecha clave
En la Comisión de Presupuesto, la oposición controla casi 30 de los 49 asientos, y en el plenario conjunto con Energía ya reúnen unas 50 firmas sobre 84. Con esa ventaja, planean dejar listos los dictámenes para la sesión del 20 de agosto.
Ese mismo día buscarán revertir vetos presidenciales a leyes de jubilaciones, moratoria previsional y emergencia en discapacidad, entre otras. Para el Gobierno, el golpe será doble: menos fondos discrecionales para negociar con las provincias y un frente político provincial fortalecido y combativo.
El impacto en números
De acuerdo con la Fundación Mediterránea, las leyes en discusión podrían implicar un gasto adicional equivalente al 0,3% del PBI en lo que resta de 2025, y cerca del 0,8% si se anualiza. Solo algunos gobernadores, como Rogelio Frigerio y Martín Llaryora, lograron pactar con la Corte Suprema para recibir anticipos financieros.
Mientras tanto, el Congreso no se detiene: hoy la Comisión de Asuntos Constitucionales retomará la investigación sobre la criptomoneda $Libra, y mañana seguirá el debate sobre el proyecto del Régimen de Promoción de la Salud Cerebral impulsado por Facundo Manes.