Tras el duro revés en la provincia de Buenos Aires, Karina Milei convocó a intendentes y referentes del PRO en Casa Rosada para reorganizar la estrategia electoral y enviar señales de unidad de cara a octubre.
Una cumbre a puertas cerradas tras el golpe electoral
Este martes, Milei encabezó la primera reunión formal de la mesa política bonaerense en el Salón Norte de la Casa Rosada. El encuentro, que duró algo más de dos horas, reunió a figuras como Cristian Ritondo, Diego Santilli, Guillermo Montenegro, Diego Valenzuela, Ramón Lanús, Maximiliano Bondarenko, Santiago Caputo y Sebastián Pareja. Sin embargo, algunos referentes libertarios quedaron fuera del nuevo armado, entre ellos José Luis Espert y “Lule” Menem.
Ausencias y reacomodamientos que marcaron la reunión
La inclusión de dirigentes del PRO y la exclusión de figuras libertarias generaron tensiones internas. “Las Fuerzas del Cielo”, el sector más radicalizado ligado a Caputo, expresó su malestar por no haber sido convocado. Por su parte, Espert se retiró antes del inicio formal del cónclave.
Desde el oficialismo aclararon que el objetivo fue “sumar experiencia territorial” y mejorar la coordinación electoral. La mesa bonaerense tendrá reuniones semanales hasta los comicios de octubre.
Rearmar la estrategia tras la derrota
El frente bonaerense quedó en el centro de la agenda después de perder frente a Fuerza Patria por 13 puntos. La urgencia por reorganizar la campaña llevó a que varios intendentes suspendieran sus agendas para asistir a la convocatoria de último momento.
Según fuentes cercanas a Milei, la prioridad es unificar criterios y reforzar la presencia en territorio. “Vamos a aprovechar las miradas de todos y tomar decisiones en conjunto para mejorar en octubre”, aseguraron.
