El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aprovechó un acto en La Plata para encender la campaña contra el presidente Javier Milei y su plan de ajuste. Frente al intendente Julio Alak y militantes, pidió que la bronca contra las políticas del Gobierno nacional se transforme en votos para Fuerza Patria.
“El enojo no puede quedar entre cuatro paredes: hay que expresarlo en las urnas, eligiendo la boleta que defiende derechos”, disparó.
Kicillof advirtió que las elecciones legislativas de septiembre serán clave para “ponerle un freno a la motosierra”. Según el mandatario, votar al oficialismo sería darle un “cheque en blanco” para profundizar recortes que afectan a la producción y el trabajo.
También acusó a Milei de “destruir el federalismo y vaciar de recursos a la Provincia”, aunque aseguró que su gestión sigue sosteniendo obras “que mejoran la vida de la gente” pese a la caída de fondos nacionales.
El mensaje llegó durante la inauguración de la obra de ensanche y repavimentación de la Diagonal 74, en La Plata, donde Kicillof buscó mostrar que, a pesar del ajuste, la Provincia mantiene en pie proyectos de infraestructura.