Los profesionales residentes del Hospital Garrahan llevaron a cabo una movilización pacífica con velas en el Obelisco, reclamando respuestas claras sobre la recomposición salarial y denunciando que la propuesta de un ingreso de 1.300.000 pesos aún no fue formalmente presentada.
Esta protesta forma parte de un plan de lucha en busca de salarios justos y mejores condiciones laborales. A pesar de rumores sobre un bono no remunerativo que elevaría el salario hasta 1.300.000 pesos, los residentes esperan una oferta oficial del Ministerio de Salud.
Actualmente, quienes participan del paro exigen que el gobierno brinde soluciones concretas a la problemática salarial, que no supera los 800 mil pesos y no cubre las exigencias mínimas. Además, denuncian la sobrecarga laboral con guardias que pueden extenderse hasta 24 horas seguidas y la falta de insumos e infraestructura adecuada.
Durante las asambleas que mantienen, los médicos y enfermeros residentes rechazaron los argumentos oficiales que culpan a la “burocracia” hospitalaria por las dificultades presupuestarias. Una de las frases que se escuchan en la marcha es: “Sin residentes no hay hospital, precarizados no vamos a trabajar”.
El pasado lunes por la tarde se realizó una reunión en el Hospital Garrahan para analizar la propuesta no oficial del bono, que elevaría los ingresos a 1.300.000 pesos. Sin embargo, la oferta no fue bien recibida y será discutida nuevamente en la próxima asamblea para decidir los pasos a seguir en la lucha.
