Las ventas minoristas de las pequeñas y medianas empresas registraron en mayo una caída del 2,9% en comparación con el mismo mes del año pasado, según informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). En la comparación mensual desestacionalizada, también se observó un retroceso, esta vez del 0,7% respecto a abril.
De los siete rubros relevados por CAME, apenas dos mostraron crecimiento interanual: Perfumería, con un aumento del 5,2%, y Farmacia, con una suba del 1,5%. El resto presentó variaciones negativas. Alimentos y bebidas lideró las caídas con un descenso del 7,6%, seguido por Ferretería, materiales eléctricos y construcción (-2,6%), Textil e indumentaria (-1,6%) y Calzado y marroquinería (-0,5%). En tanto, el sector de Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles se mantuvo estable respecto a 2024.
Fuerte caída del consumo durante la gestión Milei
Un informe elaborado por el Centro RA, perteneciente a la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, reveló que durante la gestión de Javier Milei el consumo cayó un 22% en mayoristas y un 8% en supermercados.
El estudio advierte que se profundiza la retracción tanto en el consumo mayorista como minorista, en gran parte debido al deterioro del poder adquisitivo por el salto inflacionario inicial, las políticas de ajuste y el impacto de los aumentos en tarifas, que obligaron a redirigir el gasto de bienes de consumo hacia servicios esenciales.
El diagnóstico del Centro RA
Según el informe, el desplome del consumo refleja un deterioro de los ingresos reales más severo que en años anteriores. Si bien algunos sectores productivos como el comercio y la industria muestran señales incipientes de recuperación desde el lado de la oferta, esa mejora aún no logra compensar la fuerte caída de la actividad registrada desde el inicio del nuevo gobierno.
En cuanto a la demanda, el documento señala que las ventas minoristas no logran repuntar de forma sostenida, mientras que las mayoristas siguen en franco retroceso. Entre los factores que explican esta situación se destacan el atraso cambiario y la licuación salarial, especialmente en el sector público y entre los jubilados.