Sebastián Villa, delantero colombiano de Independiente Rivadavia de Mendoza, fue el héroe del histórico triunfo del equipo mendocino frente a River en la Copa Argentina. Convirtió el penal decisivo que le permitió a su equipo meterse por primera vez en la final del torneo.
Tras el partido, Villa dedicó el logro a su familia en Medellín y a su esposa Carolina, destacando el apoyo que recibió en todo momento: “Sin ella no hubiese sido posible”, señaló. También agradeció al club y a los hinchas que confiaron en él desde su llegada.
En relación a la causa por abuso sexual que había marcado su salida de Boca Juniors y de la cual fue absuelto recientemente, Villa expresó: “La Justicia habló por mí, gloria a Dios”.
El delantero fue el encargado de ejecutar el quinto penal en el Estadio Mario Alberto Kempes, asegurando la victoria de Independiente Rivadavia y su clasificación a la final, donde se enfrentará con Argentinos Juniors. De conseguir el título, el club no solo haría historia, sino que también se clasificaría automáticamente para la próxima edición de la Copa Argentina.